En el Templo de Adoración, la intercesión es una práctica fundamental y una expresión profunda de nuestro compromiso con la fe cristiana. Entendemos la intercesión cómo la acción de orar a Dios en favor de otros, mediando y presentando sus necesidades y peticiones ante el trono divino.
Nuestro ministerio de intercesión se compone de un grupo comprometido de intercesores que se reúnen regularmente para orar por las necesidades de nuestra congregación, comunidad y el mundo. Estas sesiones buscan la intervención divina en diversas situaciones, la sanidad de corazones heridos y la dirección de Dios en todas las áreas de la vida.
Los lunes a las 3:00 PM, dedicamos un tiempo especial a la intercesión, uniendo a nuestra comunidad en oración ferviente. Durante este tiempo, intercedemos por familias, amigos, líderes y aquellos que aún no conocen a Cristo. Este espacio está abierto a todos, proporcionando un ambiente de fe y unidad donde se puede experimentar el poder transformador de la oración.
Fomentamos una cultura de intercesión diaria entre nuestros miembros, alentándolos a llevar las cargas de los demás y buscar la voluntad de Dios en todas las cosas. Proveemos recursos y formación continua para equipar a nuestra congregación en esta importante disciplina espiritual.
En el Templo de Adoración, creemos que la intercesión no solo fortalece nuestra relación con Dios, sino que también une a nuestra comunidad en amor y propósito . A través de la intercesión, nos convertimos en instrumentos de la gracia y el poder de Dios, restaurando vidas para Cristo y extendiendo Su Reino en la tierra.
Esta práctica refleja el amor y la compasión de Cristo, quien intercede constantemente por nosotros.
Hebreos 7:25